El ministro recibió a los ediles este martes con agenda abierta. Cantidad de móviles policiales y de cámaras, refuncionalización de las comisarías, coordinación de tareas con el Municipio y situación del narcomenudeo, fueron algunos de los ejes abordados.
Este martes, el ministro de Seguridad de la provincia, Pablo Cococcioni, recibió a los concejales de la ciudad de Santa Fe y, con agenda abierta, escuchó sus inquietudes. Lo hizo acompañado de gran parte de su equipo de trabajo: Virginia Coudannes, secretaria de Gestión Institucional; Sebastián Montenotte, subsecretario de Análisis Criminal; y Roque de Lima, subsecretario de Coordinación Operativa.
El encuentro tuvo lugar en la sala de reuniones del Ministerio, ubicado en 1ra. Junta 2825, y se extendió por más de una hora y media. Allí, los ediles tuvieron la oportunidad de escuchar el plan de trabajo desplegado para mejorar las condiciones de seguridad durante los primeros 55 días de gestión, y los proyectos a futuro; además de conocer de primera mano la visión del funcionario sobre las problemáticas más complicadas que se viven en la capital provincial. También, se pusieron a disposición para colaborar desde el Legislativo local.
Entre las preguntas que hicieron los ediles se destacaron el estado de situación de la policía respecto a equipamiento y personal; las acciones que se están coordinando con las autoridades locales; cantidad de cámaras instaladas y tareas para sincronizarlas con las de la Municipalidad, retención de motovehículos, entre otras.
Al comenzar el diálogo, el ministro destacó que por el estado de situación que encontraron en todo el territorio provincial, hasta el momento “gestionamos la emergencia, no hubo lugar para la planificación”.
Cococcioni mencionó que cuando asumieron se encontraron con 8 unidades de patrullaje urbano en la ciudad y que el número de cuadrículas se había reducido de 38 a 24. En estos primeros meses, esas unidades se incrementaron a 22: “Es muy bajo todavía, Santa Fe debería tener entre 40 y 50, y al final de la gestión queremos contar con 100 móviles haciendo patrullaje preventivo”, aseguró el funcionario.
Respecto a las tareas que desarrollan las comisarías, el ministro negó la versión que circuló públicamente en los últimos días de que tengan la intención de cerrarlas. Sí admitió que serán descentralizadas y refuncionalizadas porque “las funciones clásicas de las comisarías hoy están fuertemente en crisis, desde que hay GPS y se creó el 911. Las vamos a refuncionalizar, pero no las vamos a perder como espacios de seguridad: puede ser un Centro Territorial de Denuncias, una base motorizada, una unidad especial, o alguna actividad de la PDI, pero van a tener presencia policial”, explicó.
Entre los barrios más complicados de la capital provincial en materia de seguridad, mencionó a los que se encuentran en el cordón oeste y en el noroeste.
En lo que refiere a la problemática del narcotráfico y el narcomenudeo, el ministro trazó una diferencia fundamental entre la situación en Rosario y en la capital provincial: “En Santa Fe, si bien hay problemas, no se da ese fenómeno porque hay un menor desarrollo económico y porque no se da, como en Rosario, la confluencia de vías fluviales, terrestres, aéreas y ser un lugar de tránsito para el tráfico internacional, eso no se da en Santa Fe”.
Al finalizar el encuentro, la presidenta del Concejo Municipal, Adriana Molina, agradeció la predisposición de los funcionarios y el tiempo dedicado a informar a los legisladores locales: “Quiero valorar que hemos estado más de una hora y media reunidos acá con el ministro, con todo su equipo, en agenda abierta y con los concejales de todos los bloques, tratando temas que son parte de la gran preocupación de los santafesinos, como es la seguridad. Esto además sigue un lineamiento muy claro de lo que piensa respecto de la importancia de la seguridad el gobernador Maximiliano Pullaro, materia que también es muy importante para el intendente”, valoró.